Pero aquí no se cierra nuestra investigación. Buscamos la opinión de un famoso historiador de la región, el señor Guillermo González Restrepo. Él nos dijo que en Fusagasugá no hay plato típico ni va a haber por una sencilla razón, Fusagasugá ha sido un lugar de convergencia de personas que llegan de todo el país, especialmente del Tolima, Huila y una gran parte del departamento de Boyacá; los cuales traen sus propias costumbres que con el tiempo los fusagasugueños adoptan como propias. Lo único propio que identifica a Fusagasugá es la música, la rumba criolla; lo demás son tradiciones propias de la región cundiboyacense y parte del Tolima. Por lo cual,  Don Guillermo, no está de acuerdo al considerar la vara con arepa como plato típico ya que este se consigue fácilmente en diferentes lugares de Cundinamarca.

De todas formas, basándonos en la información recolectada, empezamos a indagar con los ciudadanos sobre cual consideraría que son los puntos referenciales en la ciudad por la venta de vara y arepa. Al final nos encontramos con el negocio de “Don Pedrito” y “Empanadas Doña Tere”, los cuales llevan en el mercado muchos años y, a pesar de que la especialidad de este último sean las empanadas, sus varas son bastante reconocidas entre los ciudadanos. Pero, ¿Qué es la vara con arepa? La vara con arepa es un chorizo delgado, adobado con finas especias, el cual se acompaña con arepa blanca de maíz peto sin sal o con una arepa de harina de maíz dulce rellena de queso.

Teniendo esto claro, decidimos indagar un poco más sobre la gastronomía fusagasugueña, por lo tanto, nos dirigimos a uno de los lugares con mayor antigüedad en la ciudad: “Caldo Parado”. Con más de 50 años, este lugar se ha convertido en parte del patrimonio y punto referencial entre los ciudadanos. Consta de varios locales pequeños donde se vende principalmente la gallina criolla, el cual fue el segundo plato elegido por los fusagasugueños en las encuestas.

Cabe mencionar también una golosina que fue representativa de la ciudad hace mucho tiempo: ‘Los alfandoques’, ya que Fusagasugá en tiempos remotos solía caracterizarse por su aroma a caña de azúcar, a trapiches y por la producción de alfandoques. Por tal razón, decidimos buscar algún negocio o persona en Fusagasugá que todavía vendiera o hiciera los dulces de Alfandoque. El lugar lo encontramos ubicado en un puesto en la plaza de mercado, allí se encuentra José Antonio Rincón, quien dice ser el único melcochero que queda en la ciudad.

Para finalizar, podemos concluir que Fusagasugá es una ciudad de mezcla entre varias culturas, las cuales han traído sus propias tradiciones entre ellas gastronómicas; es por esta razón que no podemos hablar de un plato típico netamente fusagasugueño. Sin embargo, la vara con arepa ha sido el plato seleccionado por los ciudadanos. De todas formas, hay muchos lugares de comidas en la ciudad que hacen parte de la identidad gastronómica del municipio.