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Carpintería Moderna

Alex  Almario

Son las siete de la mañana en el barrio la América, septiembre es un mes frio en la ciudad de Medellín, pero eso no es excusa para llegar tarde a la Carpi, son las siete en punto y solo llevo unos minutos esperando cuando noto que llega Yuli, me saluda con una sonrisa y se dispone a dar apertura a la Carpi, ese es el nombre que le da a su taller, luego llegan los dos carpinteros, dos hombres de origen venezolano que trabajan diariamente en el taller , saludan emocionados y se disponen a ponerse ropa de trabajo. Yuli, ella es delineante de arquitectura, estudia arquitectura y es la gerente del UZA mobiliaria, y en estos momentos mi guía, empieza por revisar como van los pedidos del día anterior, tomando nota de aquello que quedo haciendo falta o se termino a satisfacción. Luego se debe revisar las herramientas o elementos que se han gastado, “que la lija, que la madera, que se acabo esto, lo otro, o falta ya poco para acabarse…” me dice mientras muy ordenadamente toma nota de lo que reportan los carpinteros, de las instrucciones y los objetivos del día sin olvidar antes preguntar como le fue a cada uno en su casa, un corto espacio donde entabla conversaciones ajenas al trabajo.

Título: Carpintería Moderna

Realizador: Alex Almario

Duración: 13:26 Minutos

Lugar: Medellin,  Antioquia

Año: 2019

Luego los carpinteros indican su labor, y Yuli con lista en mano, empieza a llamar vía telefónica a sus proveedores, interrumpida a veces por el carpintero que tiene dudas respecto a el diseño que debe hacer, aquí Yuli es muy cuidadosa, hace sus modelos en 3d en su computador, y enseña a los carpinteros como quiere su producto final, se esfuerza por responder las preguntas y aclarar las dudas, y ya por costumbre atiende llamadas o mensajes en redes sociales, WhatsApp es el método ideal de los clientes, donde debe cotizar productos para futuros compradores, los clientes a veces son exigentes, se imaginan un producto de esta manera, ella aclara las posibilidades u ofrece productos que ya diseño, da observaciones de los materiales y tiempos de producción, llegando a cerrar negocios con mucha gente colaborándose con su entusiasmo ya amabilidad al atender cada llamada o mensaje., y claro estar pendientes de cobrar aquellos productos que ya vendió y dejar siempre abierta las puertas a nuevas compras, revisa igualmente las garantías de los productos y siempre esta pendiente de los carpinteros en su trabajo.

Por parte de los carpinteros, llegan con ropa cómoda y luego se cambian con la ropa que han determinado de trabajo, examinan los elementos, toman nota de lo que se quiere y conversan entre ellos, toman sus útiles elementales de trabajo, el lápiz, el metro que jamás deben faltar, y claro la madera en donde plasmaran los diseños que ya tienen en sus vistas en 3d que les enseño Yuli, toman medidas, rayan con el lápiz, usan el metro y buscan en cada trazo la perfección del producto final.
El sol se hace mas intenso y el aserrín va inundando mas el pequeño taller, el sonido de la sierra se hace intenso, y el de la lija que va dejando pulido los elementos hechos, todo ello acompañado del sudor por el trabajo, tomando solo pausas para comentar el partido de futbol de la tarde anterior, o la novela, a veces hay risas, así como a veces el sonido de la sierra es el único en la Carpi, bien porque están terminando un nuevo pedido o están explorando nuevos diseños con la madera.

El sonido de mensajes en computador también es otro acompañante, a un lado del salón se encuentra Yuli, enfrascada en solucionar algún percance con la madera que no llega, pero responde a todos, a veces aprovecha el tiempo para diseñar en su computador portátil nuevos muebles, que van desde bibliotecas, gatos, estanterías, mesones, sillas, elementos de enorme tamaño como cocinas enteras, hasta pequeños elementos decorativos hechos todos en madera.
Yuli me cuenta que hace cinco años inicio este sueño, que hasta el momento va por buen camino, inicio con la subcontratación de carpinterías en donde mandaba a hacer los diseños que se le ocurrían en su cabeza, así comenzó a tener clientes, amo el oficio del carpintero, y por cosas del destino pudo adquirir parte de las herramientas de una carpintería con la que trabajo, quizás para tristeza de aquel carpintero que debió dejar su oficio, pero para ella fue una alegría, y una oportunidad de probar suerte.
Con alto conocimiento ya en clientes y cotizaciones, recuerda que necesito para ella en su apartamento una mesa y unos butacas, los quería rápidos y que no fueran comunes a lo que se encontraba en el mercado, así se ilustro en lo que era la madera recuperada, pensando primero que disminuiría costos para después enterarse que la madera recuperada es más cara que la del pino, o demás; decidió entonces dejar ese pequeño comedor en la entrada del taller, y la gente pasaba y preguntaba por ellos, Yuli solo quería fabricar mobiliarios de alta gama, las personas empezar a pedir butacas y mesas, recuerda con mucho afecto unos cubos en los que estuvo en expo Camacol, la primera feria que participo, y así nació la idea de ampliar el negocio y pudo establecer salarios fijos, y lentamente dejo la materia recuperada a madera nueva, disminuyendo así los costos.

Algo curioso fue que pasan los vecinos y ninguno deja de saludarlos, “hola como van…” dice alguno, “¿hay que están haciendo hoy?” se toman el tiempo para observar el pequeño espacio que sirve como galería, preguntan por el precio, y si pueden adquieren el producto expuesto, les gusta en ocasiones preguntar si es posible hacer tal closet, si allí se hace una mesa de tales dimensiones, o una silla con estas cualidades, llevándose la sorpresa de que Yuli, quien les atiende siempre les da soluciones aun mejores de las que pensaron encontrar.


Me siento al lado de Yuli, y converso con ella, me cuenta que el desafío mas grande de su UZA mobiliario, no es tratar de que el cliente compre, como pudiese pensarse, es mas bien encontrar esa necesidad del cliente, saber hablarle, hacerle entender las cualidades y ventajas de la madera, no es venderle un producto a la fuerza, ir aprendiendo de los gustos del cliente, si le gusta el Roble, el Pino, el Madecor, los colores, la decoración que tiene su casa, todo se hace con el dialogo, la recolección de los datos e intereses del cliente, para poder ofrecerle al cliente un producto que le va satisfacer, todo ese control le gusta llevarlo en una agenda, una base de datos que consulta constantemente, descubriendo no solo gustos si no necesidades del cliente.
En UZA son conscientes de que cada diseño, sea pequeño o grande, necesita su tiempo, primordial para que el trabajo en madera sea llamado arte, que sea cada pieza única, pues, aunque el producto se haga para satisfacer un cliente, el producto lleva mucho de la creatividad de los carpinteros.

Yuli hace énfasis en como los diseños 3d han logrado ser más precisos, pues cada cambio al trabajar en madera es tiempo y dinero que se invierte, por eso solo cuando el cliente acepta el modelaje en 3d, se pasa a la fabricación de los productos.
Los avances de la tecnología hacen que la carpintería sea mas exigente, y permiten aun hoy día que un oficio que ha acompañado la humanidad por tantos siglos, que incluso Jesucristo, fue hijo de carpintero y muy seguramente debió empuñar clavos y martillos, elegido este arte como el oficio que lo acompañaría, pues es de dedicación, precisión, y lograr con los elementos naturales hacer nuevos bienes, fabricar nuevos usos para la madera, UZA también se esfuerza por que en su taller se vida un ambiente agradable, de compañerismo y donde la calidad sea una misión de cada día, para satisfacer los anhelos de sus clientes.
Me retiro lleno de un amor al arte de la madera, no sabía que detrás de cada mueble se escondiera tan buenas y lindas historias, me parece bien que la madera obtenga de mano de estos maestros una nueva vida, y que la carpintería siga aun en nuestros días como un oficio artístico en el cual aun se nota hay mucho por explorar.

Alex Almario

Maestro Artes Visuales

Universidad Nacional abierta y a Distancia

CEAD Medellín 2019

© 2019 by Uliana Molano

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