Movimiento en Tres Tiempos. Claudia Hakim
- gabrielavegamoreno
- 21 may 2022
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 25 may 2022
Textos, fotografías e investigación por Gabriela Vega Moreno.
Febrero - Mayo 2022
Movimiento en tres tiempos | © Gabriela Vega Moreno | 2022
Información Técnica
Nombre oficial de la obra: Movimiento en tres tiempos
Otros nombres: La Araña
Tipo de obra: Escultura
Función: Artística
Dirección o localización:
Bogotá, D.C., localidad de Chapinero, barrio Chicó:
Carrera 15 # 88-64
Tipo de emplazamiento: Entrada edificio
Dimensiones de la Obra: 2,74 x 3,12 x 2,16 m
Materiales: Acero inoxidable ensamblado
Técnica de manufactura: Soldadura eléctrica
**Se asume que es eléctrica por la naturaleza de la técnica, pero este dato no fue posible confirmarlo.
Componentes escultóricos: Aceros ensamblados y soldados
Fecha de elaboración: 2012
Fecha de inauguración: 2012
Sobre la ubicación
Vista de Movimiento en tres tiempos de Claudia Hakim. Google Maps y Google Street View. https://bit.ly/37XmrCw
Descripción del lugar donde se ubica la obra
La Torre Zimma, un edificio ubicado en la esquina de la carrera 15 con calle 90 (localidad de Chapinero) entró en operación en diciembre del 2012. Tiene cerca de ochenta metros de altura y ocho pisos de oficinas y tres sótanos de parqueaderos. Se construyó en el lote donde estuvo un edificio de tres pisos, altura que durante años fue característica del perfil del barrio El Chicó, donde se ubica. El arquitecto Camilo Manrique Santamaría, gerente General de CMS+GMP ASOCIADOS, lideró el diseño de la edificación bioclimática. La obra Movimiento en tres tiempos, de la escultora Claudia Hakim (1957), se encuentra en el andén, frente a la fachada principal de la Torre Zimma. Fue ejecutada en 2012 y mide 2,30 x 2,30 metros. A pesar del nombre de la escultura, se ha vuelto común que las personas se refieran a ella como “la araña”, cosa que no le molesta a la artista, según la misma publicación (El Tiempo Zona, 2013). Este sector de la ciudad es de mucho movimiento, pues no solo es una zona comercial tradicional, sede de empresas y zona residencial de estrato seis. Por lo tanto, es bastante concurrido y transitado por residentes, oficinistas y turistas. La presencia de público se favorece también por la cercanía al popular parque El Virrey, en la carrera 15 con calle 87. Cabe anotar que es parada obligada del tránsito vehicular, pues en esa esquina hay un semáforo y una parada de buses, lo que también propicia que la gente aprecie la obra.
Sobre el contexto y la autora
Contexto histórico de la obra:
La obra Movimiento en tres tiempos, fue ejecutada en 2012, para que acompañara la fachada del edificio Zimma.
Siguiendo la línea de pensamiento de la autora, Claudia Hakim sobre la analogía entre tejidos y esculturas de metal, la obra está compuesta por numerosas láminas de metal que permiten infinitas apreciaciones dependiendo desde dónde se observe.
Autora: Claudia Hakim
Biografía de la autora
La escultora Claudia Hakim nació en Bogotá en 1957. Ha dividido su trabajo entre su ser artista y la gestión cultural. En este campo encaja la dirección del Museo de Arte Moderno de Bogotá, que desempeña desde el 2016, y de NC-Arte, un proyecto cultural y educativo creado en el 2011 con el apoyo de la Fundación Neme (su esposo es Nayib Neme) con el propósito de contribuir al desarrollo de las artes visuales en Colombia y Latinoamérica. Aprendió de diseño textil en la Universidad de los Andes porque amaba las fibras y tapices, una pasión tal vez heredada de sus ancestros libaneses. A mediados de los ochenta del siglo pasado, estudió cerámica, escultura en barro, diseño de joyas e historia del arte en el Oxford College (Reino Unido). Sus primeras esculturas fueron estructuras en textiles que también intervenía con yeso y pintura “para asegurar su permanencia en el tiempo” (Cabrera, 2014). Empezó a emplear metal cuando se percató de que podía tejerlo, “ensamblando piezas o trabajando con malla perforada, que para mí es una tela. Con una tuerca y un tornillo puedo hacer una puntada” (Amarilo, 2021). Desde que vinculó esos dos procesos, dejó a un lado las fibras y se dedicó exclusivamente a entrelazar desechos automotrices para crear esculturas. “Una malla puede ser una tela, así que empecé a meter tuerca y tornillo como si estuviera haciendo punto de cruz” (Cabrera, 2014). Es columnista del periódico El Tiempo.
Análisis
Análisis iconográfico
Unos metros antes de llegar a la esquina suroriental de la calle 90 con carrera 15, se encuentra una escultura abstracta. La obra no tiene principio ni fin, se puede observar desde cualquier ángulo, para crear cualquier interpretación que satisfaga a quien la ve. Lo importante es detenerse a observarla. La escultura de Claudia Hakim está compuesta por numerosos páneles de acero, de distintos tamaños, separados entre sí de manera equidistante y unidos en ciertas alturas por barrotes y varillas de acero soldadas. Los páneles se despliegan en diversas direcciones y a veces parecen emular una mano de cartas. Dependiendo de dónde se ubique quien la observe, podrá ver una sola masa de acero o podrá ver cómo el paisaje urbano se cuela por entre las láminas. No tiene ninguna base ni pedestal. Está atornillada directamente al andén, por unos gruesos tornillos, también de acero.
Análisis iconológico
Esta es una escultura abstracta que representa el movimiento. Según la artista, citada por el Instituto Distrital de Patrimonio Cultural (2019: 185), “la creación de patrones, movimiento y construcción de estructuras que la luz pueda atravesar, son elementos que se pueden observar en un tejido y que están presentes en Movimiento en tres tiempos”. Además, se ha vuelto común que las personas se refieran a ella como “la araña”, cosa que no le molesta a la artista, según la misma publicación (El Tiempo Zona, 2013). La obra resalta en un sector de la ciudad en el que el común denominador de la ornamentación urbana son los árboles. Encontrar una figura en principio rígida, pero que de algún modo tiene su propio movimiento, es disruptivo para los transeúntes de la zona, y la parada a observarla se vuelve icónica. Movimiento en tres tiempos resulta, pues, teniendo una relación armónica con el resto del paisaje urbano de la calle 90 con carrera 15, gracias a todas las posibilidades de observación que ofrece.
Apropiación social de la obra:
Este sector de la ciudad es de mucho movimiento, pues no solo es una zona comercial tradicional, sede de empresas y zona residencial de estrato seis. Por lo tanto, es bastante concurrido y transitado por residentes, oficinistas y turistas. La presencia de público se favorece también por la cercanía al popular parque El Virrey, en la carrera 15 con calle 87. Cabe anotar que es parada obligada del tránsito vehicular, pues en esa esquina hay un semáforo y una parada de buses, lo que también propicia que la gente aprecie la obra.
Hakim opinó: “A mí me encanta que la gente cuando pasa, se imagine cosas; es una pieza que pide un alto en el camino de las personas. Ellos paran, la recorren y se van con un pensamiento en la cabeza (...) Ya he visto cómo la gente se toma fotos, se ríe. Eso explica que la obra puede generar un sentido de pertenencia y de cuidado. Además, me alegra que no la hayan pintado” (El Tiempo Zona, 2013).
Conservación y Recomendaciones
Estado de conservación: Bueno
Afectaciones indirectas (Entorno)
La zona donde está emplazada la escultura es de alto flujo vehicular, por lo que es un sector afectado por las emisiones de material particulado de los automotores. Según la Red de Monitoreo de Calidad del Aire en Bogotá, para la localidad de Chapinero arroja mediciones favorables o moderadas (Veeduría Distrital, 2021). A pesar de que la obra está expuesta a esta contaminación, no se observan rastros de ella en sus paneles, tal vez porque el personal del edificio que la contrató se encarga de limpiarla. A pesar alto índice de precipitaciones de la ciudad, el acero inoxidable del que están compuestas sus láminas asegura que el agua no las afecte. Sin embargo, su base y anclaje podrían verse afectadas por charcos y apostamientos de agua, aunque no se perciben evidencias de estos fenómenos durante los diez años de existencia de la escultura en este lugar. Empero, con el paso de los años, el concreto del que está hecho el andén podría deteriorarse, propiciando la presencia de agua en su base. La proximidad de la escultura con el Banco de Bogotá la beneficia de sus sistemas de seguridad, de sus guardias de vigilancia como de los del edificio. Esto reduce el riesgo de vandalismo por pintura, rayones o impactos (de los cuales hay unas ligeras evidencias) especialmente durante el día, cuando hay mucha presencia de personas.
Afectaciones directas (sobre la obra)
Aunque la escultura tiene una placa que hace referencia a la autora, al año de elaboración y a su técnica, no hay mucha información acerca de la obra ni se conoce mucho de ella. El riesgo de disociación es medio porque si bien en el lugar hacen falta datos, en internet es posible encontrar suficientes que dan cuenta de la escultura, su autora, la técnica empleada y el sentido de evocación al tejido que tiene toda su obra. Sin embargo, no hay mayor difusión y es necesario tomar la iniciativa para enterarse de estos aspectos. No se observa la presencia de plagas, moho u hongos ni de otros organismos en la escultura, ventaja que seguramente deriva del material en que está hecha. Tampoco está afectada por excrementos de aves, que tal vez no abundan por la constante presencia de personas y vehículos en el sector. En vista de que la escultura se encuentra en la acera de una vía de alto tráfico (automotores, camiones de reparto y buses de transporte público), está expuesta a las vibraciones de estos vehículos, además del riesgo por colisión, pues, aunque el andén es bastante alto y la obra está a por lo menos dos metros de la calle, ni está en un pedestal que minimice el riesgo ni cuenta con alguna reja de protección. Si bien es poco probable que la colisión, por ejemplo de un bus pueda dañar gravemente la obra por el material en que está construida, es más probable que la arranque del piso, pues los tornillos del anclaje no parecen diseñados para soportar un impacto de este tipo. Otra posibilidad es que la vibración causada por el constante flujo vehicular pueda deteriorar el anclaje de la obra.
Descripción daños:
La obra está en muy buenas condiciones; solo tiene pequeñas rayaduras de vandalismos sin trascendencia.
Recomendaciones:
Se recomienda realizar manutención preventiva y limpiezas constantes de la escultura. También, se recomienda la instalación de una segunda placa con funciones informativas, que dé cuenta del significado de la obra, para que quienes la visitan puedan sentir una mayor conexión con ella, y de este modo se sientan inclinadas a su cuidado.
Movimiento en tres tiempos | © Gabriela Vega Moreno | 2022
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